11 nov 2009

Entre silencios y risas

Por la izquierda me adelanta el sol
a la derecha girasoles callados,
delante de mí el océano brama,
arriba la luna observa
y detrás el rollo de mi película.

Soy to lo tocao, to lo leío
lo visto y sentío.

Vivo del vocabulario del corazón,
de las páginas del tiempo
que ríe y llora conmigo,
que se ríe de mí.

5 comentarios:

Miguel dijo...

Me gusta mucho la última estrofa del poema. El contenido de las dos anteriores me recuerda algún texto de Pink Floyd, uno de los que te he enviado en vídeo, y que seguramente has asimilado inconcientemente. Desde luego, la forma de abordar la segunda estrofa no deja de ser original y tener guasa. Yo no me hubiera atrevido, pero me llevas de tu mano: a ver quién se atreve a juzgar la elementalidad y la verdad de lo que allí has escrito. Pero lejos de ser literario, te diría que a pesar de la "cruda realidad", precisamente, somos también presentes en un terreno vedado y oculto que aún no conoces. Crééme que se trata de un sentimiento mucho más real y poderoso de lo que imaginas. Se ha dicho de él que es la "filosofía peremne",de la que han hablado santos y maestros a través de los siglos. El mundo (nosotros mismos) le hemos echado un pulso, sin que hayamos jamás intimidado su fortaleza...Bueno, ojalá vayas mejorando rápidamente. Habría mucho de que hablar, no me parece cosa de una visita. Parece que esta vida va en serio, a juzgar por lo que graciosamente expresamos en nuestros poemas o en la conversación de cada encuentro. Créeme que te guardo un profundo cariño. También sé que soy correspondido. No sé si te sirve mi experiencia, pero cuenta con ella. Hoy no me quiero poner pesado con aspectos técnicos. Me intereso más por lo que "dices" en tus versos. El aspecto formal no resulta tan atractivo como lo que se lee entre líneas.
Salud, amigo. Volveré a llamarte para interesarme por tu salud. Hasta pronto, entonces.

Pepe López dijo...

Gracias, Miguel, por todo el cariño que viertes en tus comentarios. Si conociera todo sobre la vida.. sría aburrida, y la verdad es que me intriga saber a qué te refieres en concreto. Supongo que en el próximo café con su charla y relajción incluida, me contarás más sobre eso y más cosas.

mi rehabilitación va lenta pero bien, con la rodilla poco inflamada aunque aún ando con muletas. Como soy un show, lo miso ando con dos que con una que sin muletas. Aquí, aunque sea una tontería, se refleja mi mayor defecto: la falta de continuidad en lo que hago. ´

Siempre es poitivo recordar a grandes músicos, también creo que tienes razón en lo de que lo interiorizara sin darme cuenta.

Al menos en mí, tengo claro que mayor tiempo invertido en escribir y pulir un poema, no significa mejor resultado.

Salud, amigo

Pepe López dijo...

Ah, querido Miguel, se me olvidó decirte que aún no me has dado la página de tu nuevo blog.

Miguel dijo...

Querido Pepe: Aún no he publicado nada en mi nuevo blog; ni esperes sorprenderte con una novedad inesperada. Practicamente, es una copia del anterior. En realidad, he buscado la decencia de su aspecto, nada más. Iré, poco a poco, colgando los poemas, revisados. Tampoco es tan difícil admitir que uno escribe asumiendo el riesgo de no ser comprendido: yo creo que esto es parte de la singularidad del poeta, precisamente, que no es una poesía enrarecida sino con distintos contenidos y nueva apariencia. Ya sabes, Pepe, que además cosecho frutos del "árbol del que no se habla". Bueno, apaga y vámonos.
En fin, el blog aparece con un título birlado a un excelente músico del que no recuerdo su nombre, ni la pieza musical en cuestión, de modo que no luedo hacerle justicia o mostrarle mi gratitud, pero reconozco mi deuda.
"Un buceo lento" Miguel Estrada Pérez-Carasa, de esta manera puedes encontrarme en Google, por ahora. Internet me permite publicar esta pequeña obrilla, que ha resistido el tiempo de mi desinterés y descuido, y continuar escribiendo. Ojalá encontrara también en otros lectores una atención tan fiel y comprensiva como la tuya, ya que corro el riesgo de la indiferencia y el olvido, creo yo, que injusto (perdona esta petulancia, que es puro desahogo).
Lo importante ahora es que te pongas bien, que superes ese déficit indolente de tu carácter que acaba haciéndote su víctima, y tomemos ese café, postergado por las circustancias.
Un abrazo, Pepe.Muchas gracias. Salud.

Marina dijo...

Hola Pepe, estas rodeado pero de preciosas letras, y algunas hasta se rien, no de tí, si no contigo. Un gran ¡¡¡¡saludo!!!! a ver si te llega, ja.