Todo un clasico

Cine clásico del bueno.

Pasame el colgate

“Pásame el colgate” es algo que todos hemos dicho más de una vez, aunque la marca del dentrífico sea otra. ¿casualidad o fenómeno paranormal? No le demos ideas a Iker jiménez, que nos monta un plató imitando una boca y se nos viste de tapón.
Se trata de una campaña de captación de consumidores. Primero sacaron el dentrífico – juguete, con la ayuda de la ley de murphy. ¿recuerdan el tapón? Pues ese era el juguete. Íbamos al cuarto de baño, cogíamos el cepillo y la pasta con una mano. Haciendo un poco de malabarismo, desenroscábamos el tapón.
Comienza el juego. Con un ritmo lento quitamos el tapón de rosca del colgate. Sin saber cómo ¿como se ha podido escapar si lo he hecho con cuidado? - nos preguntamos. Acelerando el ritmo tratamos de evitar lo innevitable. El tapón empieza a cobrar vida y se pone a corretear por el lavabo y nuestras manos y ojos se ponen a seguirlo. ¡Cachi! ¡lo cogí! ¡uiiiiiiii! Casi lo consigo. Después de volverme loco el tapón acaba en el desagüe y por si fuera poco, ocupa justo la superficie del agujero. Ni se cae ni lo podemos coger facílmente. Supongo que cada uno tenía su técnica. La mía era coger las tijeritas con final en curva para tirar de él. Y... voilá. Lo conseguí. Con el tapón en la mano me sentía el más feliz del mundo. GAME OVER

Luego, tras varios años de investigación, llegó al mercado el colgate total: limpia y abrillanta imitando al mister proper en formato mini y sin el tapón listillo. Era como las latas de conserva, ¡tenía abrefácil! Ooooohhhhhhhhhhhh Si el dentrífico – juguete había conseguido sentirme mejor, con este paso se convirtió en mi guía. Sabían lo que necesitaba en cada momento. Hace poco el colgate 360 convulsionó el sector dentrifiquero y me fue imposible resistirme. Con un solo clic llegaba a todos los rincones de la boca y si le dabas la vuelta al cepillo, limpiaba la lengua como si fuera mister proper. Si es que está todo relacionado.

¿Qué será lo próximo? ¿le añadirán aloe vera? ¿tendrá vitaminas esenciales para nuestro organismo? ¿tendrá L casei inmunitas? ¿combatirá el colesterol? ¿será adelgazante? ¿limpiará la campanilla? ¿regenerador de dientes? ¿ si envías un SMS al 4334 con la palabra COLGATE entrarás en un sorteo para tener colgate durante toda la vida?

No lo sé, pero lo compraré.

Soy

Soy alto porque me ves alto,
Soy bueno porque me ves así,
Soy generoso porque me ves así,
Soy sonriente porque quieres verme alegre,
Duermo bien porque te sueño,
Existo porque quieres que exista.

Salvaje obsesión

Que me perdonen los eruditos
Que no se enfaden los dioses griegos
No quiero saber de reniegos

Soy lunático y problemático,
Amor prohibido, selvático.
Es luz y sombra, lejana cercanía,
Tiemblo al pensar que es mi alegría
No sabe que desde el primer día.

Se para el tiempo, es arrebato la mar,
En lo inmediato, el blanco el negro quemar.
Las lágrimas corren, no son de dolor,
De roja pasión descontrolada son.

En la tribuna de la pasión
Quisiera darle mi corazón,
Gozar el blanco de su alirón
El rojo de mi aceleración.


No me ves pero te quiero,
En tu cuerpo quiero entrar,
Ser tus brazos, tu alma tocar,
No me abandones, me quiebro.

En silencio ves, mis palabras lees,
Tienes mirada perdida, lo sé.
Sé que para tí solo existo aquí.

Un terromoto llamado juventud

Quizá sea porque mi generación, la tanta aclamada hoy día, haya sido poco crítica o por otra razón, lo cierto es que en este siglo ha habido un terremoto por el que aún sufrimos las consecuencias. Ya no es un pilar fundamental la familia para los chavales que convierten las aulas en jaulas para los profesores y amordazan a sus progenitores. Para ellos, lo más importante son los amigos y la familia se ha quedado como una bola de acero atada al pie.
Este cambio, en mi opinión, ha sido demasíado brusco. No sé cómo se podrá poner paz y no creo que sea algo que atañe a la Iglesia. Es penoso saber que en muchas casas en las que hay niños entre los catorce y diecinueve años, se vivan contínuas campañas campales en las que se ningunea a los que les han dado la vida e intentan educarlos sin resultado alguno. Claro, para eso está la ley de la calle. ¡Qué equivocados están!

la foto del silencio

Es la traición del silencio mi cuarto,
La cama, tres pequeñas fotos a diario
Cambian sin ton ni son mi calendario.
Trepa por la pared ese lagarto.

Es la nostalgia su escenario y manto,
Mi cabeza estalla rápido en pedazos,
Y transformados quedan mis retazos.
Huecas palabras, silencio, mi espanto.

Puerta cerrada, una de las pequeñas
Quiso morder el silencio. Pasó.
Mi habitación fue un instante acordeón.

Pero una voz descuartizó la foto
Tanto que fue una granada en mi mente.
Adios silencio adios. Adios horror.